"EL JARDÍN DEL ALMA" fue el nombre elegido para aquella institución, cuya finalidad principal sería acoger a los menores desheredados y abandonados en aquel mundo inhóspito. Sus objetivos primordiales protegerlos pero también prepararlos para el mundo exterior y su integración en el mundo laboral y social. Su proyecto estaba encaminado a la Política social de Protección de Menores.
Imagen extraída de la red de internet.
<<El aprendizaje reside en el cerebro de las personas que cuenta con dos hemisferios. El hemisferio derecho es el responsable de la imaginación, los colores, la emotividad y la imaginación. Sin embargo, el izquierdo es el responsable del pensamiento lógico, el verbal, el numérico, analítico y secuencial.>> (Fragmento extraído del módulo 1)
Hermes conocía que existían otros proyectos para salvaguardar al planeta Tierra. Proyectos encaminados a la Administración electrónica, a la Local, a la Protección de Datos, al Patrimonio Histórico, Medioambientales,...
Pero también había sido informado de que las cosas en el planeta iba de mal en peor, la temida escalada que llevaría al desastre nuclear cada día era más palpable. Los equipos debían darse prisa para salvar la Tierra de la hecatombe que se avecinaba. Su lejano 3169 parecía algo del pasado, no del futuro. Hacía tanto tiempo que había partido del futuro que se había convertido en pasado, ahora se sentía parte de este nuevo mundo que estaba intentado salvar con sus escasos medios. Se estaba adaptando bien en Selene y estaba haciendo nuevas amistades que estaban calando en su interior y echando profundas raíces. Incluso temía el día que tuviera que volver a su nave nodriza.
Como primer objetivo se marcaron realizar simultáneamente la contratación del personal adecuado y encargarse primero de la higiene de los menores.
Hermes era el cerebro izquierdo, y se encargó de la contratación y organización.
Gea era el derecho y se encargó de la parte más humana, la higiene física primero y luego la salud mental de los menores.
Hermes buscó en Selene el personal adecuado para su programa, no fue difícil, el planeta estaba repleto de personas bien preparadas en busca de empleo. La crisis afectaba lo mismo a la Tierra que a los habitantes de Selene.
Contrató a Javier, para que se encargara de la Dirección, sus conocimientos en Derecho, Gestión Económica y Servicios Sociales eran excelentes para dicho cargo.
A Margalida para la Subdirección, por su experiencia en prevención de riesgos laborales, calidad y medio ambiente. Y a Clara por sus conocimientos en pedagogía y enseñanza-aprendizaje.
También contrató a un grupo de cuatro personas que apoyaran al equipo educativo:
Alicia, Mar, Andrea y Andrés. Que representaban a los cuatro elementos de la naturaleza. Tierra, Agua, Aire y Fuego.
Mar, el Agua, comprensiva, divertida, flexible, meditativa, sensible, indulgente. Era la alegría contagiosa para estimular a los menores.
Andrea, el Aire, la guerrera, cordial, clara, luminosa, optimista, diligente . Se encargaría de movilizar a los menores para que nunca se rindieran.
Andrés, el Fuego, vigilante, cuidadoso, entusiasmado, osado y persistente. Se encargaría de promover la autoestima y programar actividades lúdicas.
La madre Gea, que había trasladado todo lo bueno de la Tierra a Selene, con su equipo y las nuevas contrataciones se encargó del aseo e higiene físico de los menores, que fueron liberados de los parásitos que invadían sus cuerpos. Luego, se dedicó a su salud mental, anhelaba que recuperaran su dignidad, su autoestima, su alegría infantil y sus ansias de aprender.
Liberó a los menores de sus castigos: Tántalo recibió comida y bebida, Sísifo fue liberado de cargar la pesada piedra, Edipo recuperó la vista, Prometeo fue liberado de los parásitos que le comían las entrañas, Psique encontró al que era su amado para descubrir que todo era una quimera y abrió su corazón a nuevas oportunidades, y a Dafne le extirpó esa espina que llevaba clavada y cesó su dolor.
El lema elegido por consenso sería el siguiente:
"Regala un pescado a un hombre y le darás alimento para un día, enséñale a pescar y lo alimentarás para el resto de su vida"
Proverbio chino.
El equipo decidió que ese era el mejor lema para su organización. Enseñarían a los menores según sus capacidades, edades, ilusiones y deseos, los elementos básicos para el aprendizaje para su futuro tanto educativo como laboral.
Gea, la suministradora, les ofreció cañas de pescar, azadas, semillas, herramientas.
Entre todos sembraron las semillas, hicieron acequias para canalizar la escasa agua que poseían, aprendieron a pescar. Pero surgió un problema. Selene era una creación humana a medio terminar. Las potencias habían logrado proveerle de atmósfera respirable, pero apenas se producían lluvias, el agua escaseaba, la tierra estaba quemada por el sol y era poco fértil.
En este punto determinado intervino Gea y sus poderes mágicos. Subió a una montaña cercana y derramó una única lágrima, una pequeña gota, que se deslizó por su rostro y cayó entre las secas piedras, de donde surgió un manantial de agua pura y fresca, que discurrió hacia el valle, formando un lago en su zona más profunda. Se construyeron norias, embalses que llevaran ese agua potable al recinto y fertilizara los huertos y brotaran las semillas.
Gea, la Madre Naturaleza, tocó el lago y se llenó de peces, luego con el barro Alicia modeló animales domésticos que según tocaba Gea iban cobrando vida. Los menores se hicieron cargo del cuidado de sus semillas y sus animales, los más mayores del cuidado de las acequias. Los adultos del trabajo más duro y de enseñar a los menores a leer, escribir, valorar el esfuerzo, fomentar su creatividad e imaginación, cuidar su higiene, saber escuchar y saber hablar, empatía, asertividad y resiliencia.
El trabajo era arduo pero productivo, eficaz y eficiente.
Fue todo un acontecimiento en la comunidad el día en que brotó la primera planta, el fruto de tanto trabajo se había materializado en el nacimiento de aquel primer retoño.
Todas las noches, Hermes salía del recinto y se sentaba en una gran roca para enviar a su nave nodriza todos los datos acumulados cada día y la evolución de su proyecto. Sólo tenía que activar el implante alojado en su cerebro para que toda la información viajara a través del espacio sideral hacia su nave y desde allí a través del tiempo a la Gran Alianza de la Administración, que iba recabando la información de los distintos equipos formados.
Sigilosamente apareció Gea en la oscuridad.
-Sé quien eres-dijo Gea-. ¿Has decidido que vas a hacer cuando termine todo esto?
-¿Por qué me preguntas lo que ya sabes? Yo también sé quien eres tú.
-Soy la VIDA. Principio y fin, alfa y omega, construcción y destrucción, vida y muerte. Estoy aquí para ayudaros a salvar el planeta Tierra del desastre.
-Eres poderosa, porque no lo haces tú misma.
-Le regalé a la humanidad un tesoro, en sus manos está salvaguardar el planeta o destruirlo. Lo dejo a su libre albedrío y quiero comprobar hasta que punto son capaces de colaborar y cooperar, o llevarse por intereses egoístas y dejar que la Tierra sea destruida.
Continuará...
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Imágenes tomadas de Pixabay.
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